La iglesia
de San Nicolás de Bari y San Pedro Mártir
se creó
hacia el año 1242.
Es una de las
12 primeras parroquias cristianas
que se
crearon en Valencia
después de
que Jaime I reconquistara la ciudad en 1238.
Entre 1419 y
1455, la familia Borja la reformó al estilo gótico
y
construyeron la bóveda gótica de crucería en
la nave central.
Entre 1690 y
1693 se volvió a decorar el interior
con
decoración barroca y frescos
que muestran
la vida de San Nicolás de Bari y de San Pedro Mártir.
Antonio
Palomino diseñó las escenas de los frescos
y Dionís
Vidal las pintó.
La iglesia
se ha restaurado hace poco,
por eso
podemos disfrutar de estas pinturas
que los
expertos llaman la Capilla Sixtina valenciana.
Esta
restauración es la más importante
en el mundo
hasta el día de hoy.
Por la
cantidad de trabajo que necesitó
y el cuidado
y el detalle que se puso para hacerla.
Cada lunes
llegan a la iglesia cientos de visitantes
que hacen la
Caminata de San Nicolás
o la
Devoción a San Judas Tadeo,
patrón de
las causas imposibles.
Puedes
visitar la iglesia con o sin visita guiada.
Caballeros, 35; 46001 - Valencia